Terapia de pareja

Todos buscamos amor y seguridad. Si un día tenemos la suerte de encontrar a la persona adecuada a nuestro lado, nos sentimos realizados y llenos de felicidad. No hay nada que deseemos más que poder mantener este estado para siempre.

Desgraciadamente, a menudo las cosas resultan distintas de lo que esperábamos. La vida cotidiana, los cambios personales y otros motivos alteran nuestro equilibrio. A veces se trata de un acontecimiento grave, a veces la crisis de pareja se nos viene encima poco a poco, y finalmente dejamos de sentirnos cómodos, seguros o queridos.

En la terapia, las parejas descubren qué factores han provocado el conflicto. Las relaciones no son fáciles y  la terapia intenta desentrañar la complejidad y aclarar los aspectos que pudieran ser conflictivos. La forma en la que nos comunicamos , el desequilibrio entre lo que se da y lo que se recibe, las ofensas tácitas y no resueltas y los acontecimientos vitales que experimentamos, como las experiencias de la infancia, ocupan un lugar central.

Muchas personas no se atreven a expresar claramente sus necesidades por miedo a ser abandonadas. Otras, por el contrario, intentan salirse de lo cotidiano y, como consecuencia pueden llegar a herir a su pareja.

El objetivo de la terapia de pareja es restablecer el equilibrio entre cercanía y distancia, permitir una comunicación abierta y sin miedos, adoptar perspectivas mutuas y averiguar si tiene sentido que la relación continúe. 

Si en las tres o cuatro primeras sesiones queda claro que la relación puede salvarse, entonces se pone en práctica el apoyo conjunto a los miembros de la pareja para que se comprendan mutuamente, modelen un nuevo camino y creen así las condiciones para que se restablezca el bienestar entre ellos.

Dado que los conflictos de pareja afectan al bienestar psicológico y físico, es esencial que la pareja reconozca la gravedad de la situación, participe activamente, se abra al proceso de terapia y reflexione sobre todo lo anterior.
Si, finalmente, no se alcanzase el éxito, en los casos en que las parejas deciden separarse, también puede aplicarse el acompañamiento necesario en el proceso de separación.